La transformación digital está relacionado con el proceso de cambio para mejorar la operación de las organizaciones a través del uso de tecnologías digitales. Su contexto no sólo se sustenta en el uso de tecnologías y uso de herramientas innovadoras, sino también en el cambio de la cultura corporativa, la estructura, el liderazgo y el equipo con el que se puede realizar el proceso de transformación, aspectos que a menudo son más importantes que los tecnológicos. Son elementos que permitan mejorar el desempeño de la organización y del usuario final.
La transformación digital aplicada a un ambiente empresarial promete incrementar la productividad al hacer más eficientes los procesos, obteniendo como resultado mayores márgenes de ganancia y, puede proporcionar ventajas competitivas, o incluso crear nuevas, mejorando así las ventas o ingresos netos en una empresa. Al digitalizar la empresa, la toma de decisiones se vuelve más fácil, rápida y en tiempo real con la ayuda de las herramientas digitales.
México tiene grandes retos en temas de transformación digital, pues menos de una cuarta parte de las compañías que operan en el país ha iniciado su digitalización, lo que implica una oportunidad de mercado.
En México se ha rebasado la masa crítica de conectividad y adopción de tecnologías para la accesibilidad (de acuerdo con el INEGI -Instituto Nacional de Estadística- más de tres cuartas partes de la población tiene acceso a Internet y telefonía móvil), condición que permite incrementar esfuerzos de transformación digital en respuesta a estas tendencias. Cerca del 88% de la población en México tiene cobertura de Internet según el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT). De éstos, el 90% de los usuarios de Internet usa las redes para entretenerse, obtener información y comunicarse, mientras que sólo el 16.8% las usa para operaciones bancarias, el 22.1% para el comercio digital y el 35.6% para servicios de gobierno.
Si bien existen brechas en el acceso a la infraestructura digital en México, como la situación económica de los usuarios, así como la cobertura territorial de la red, no resultan ser la principal barrera para la transformación digital del país. La situación sociodemográfica de los usuarios de las redes digitales y la cultura empresarial son las principales limitantes en este escenario de oportunidades futuras.
La entrada del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC), es un acelerador para México, ya que impulsa y fomenta la cultura de transformación digital.
Consideramos que sectores como el financiero o el de comercio electrónico, serán de los que más innovación alcancen. Cambios en su modelo de negocio y estrategia digital, y la implementación de mejoras en las APPS de consumo, serán las constantes para los próximos años.
Además, es un hecho incontestable que las pequeñas y medianas empresas (pymes) mexicanas se sumarán a esta transformación. Cada vez será más común el acceso a nuevas herramientas que permitan el desarrollo y crecimiento de estos negocios.
Artículo escrito por Lloyd de Villamor